Muchas personas están cumpliendo un año haciendo home office. Si bien hay muchas ventajas al trabajar en casa, hacerlo en espacios improvisados sin el mobiliario necesario durante jornadas largas está teniendo un impacto en nuestro cuerpo.
Para bien o para mal, muchas personas han transicionado al home office de manera indefinida. Más de una empresa ha implementado esquemas híbridos, mientras otras han trasladado algunos puestos de trabajo en casa de forma definitiva.
Ante esta nueva realidad, molestias como el dolor de cuello se han hecho cada vez más comunes, ya sea por las largas jornadas de trabajo, por no contar con el mobiliario necesario en casa o por ceder ante la tentación de trabajar en lugares como el sillón, la cama, etc.
A continuación, te compartimos algunos ejercicios para liberar la tensión que se acumula el cuello y evitar que se agraven las molestias:
Ejercicio 1. Siéntate en un lugar donde tu espalda se mantenga recta. Estira el cuello, afloja los músculos y lleva tu cabeza de un lado a otro, como si quisieras que tu oreja tocara tu hombro. Mantén la posición por unos minutos y repite del otro lado. Realiza 4 repeticiones de cada lado.
Ejercicio 2. Siéntate en un lugar donde tu espalda se mantenga recta. Gira tu cabeza despacio a la derecha y sostén la posición por un par de segundos. Gira después a la izquierda. Realiza 6 repeticiones de cada lado.
Ejercicio 3. Apoya una toalla en la base del cráneo y cógela por los extremos. Mueve la cabeza hacia atrás mirando al techo, mantén la posición por unos segundos y vuelve a la posición inicial. Realiza 4 repeticiones.
Ejercicio 4. Cruza los dedos detrás de la cabeza, acerca los codos hasta que queden en paralelo y lleva la barbilla hacia el pecho, dejando que el peso de tus manos te ayude. Mantén la posición durante 10 segundos. Haz las repeticiones que consideres necesarias.